viernes, enero 11, 2008

perfumes rotos



Pasaron varios días hasta que alguien cayó en la cuenta de que los sueños habían desaparecido Era ya de noche, era una de esas noches curiosas y tranquilas donde todo parece más apacible y quieto de lo que suele serlo, era una noche con cierta esencia en el aire que invitaba a pensar en viejos recuerdos, y a romper con el forzoso habito de todos los días, que ahora termina haciéndote caminar por una noche cualquiera, haciéndote seguir aquel aroma de una nostalgia que podría ser pasajera si no fuera porque es muy tarde para regresar a la rutina diaria que debió darse ya por terminada, y sabes que es demasiado noche ya para que importe y comprendes que no es la luna llena, ni el hecho de resignarse a perderte parte del siguiente día cualquiera lo que te tiene yendo por un camino del que aun no vislumbras ningún futuro, pero que por lo único que entiendes, terminará dándote algo que has buscado por mucho tiempo, un alivio.

Era una noche de esas con un viento frío pero de esas en las que sientes que no necesitas un abrigo, de esas obscuras y tenebrosas que te darían miedo si no fuera por que ese camino te hace sentir vivo, y ésa noche prefieres caminar entre las sombras, una de ésas noches que parecen tan viejas en tus recuerdos que al tratar de buscarlas de nuevo de pronto recuerdas nunca haber vivido, has caminado cien veces por el mismo rumbo pero es la primera vez que te encuentras solo en ésta calle, y puedes llegar a creer que te encuentras solo en el mundo.

Una noche perfecta para ajustar cuentas, en las que parece que nada importa y que todo se renueva, una noche que podría haber sido muy esperada por muchos, y tan insignificante para tantos, pero que después de todo es perfecta como cualquier otro final para el día en un sitio cualquiera, un día que en algún lado tuvo que haber estado lleno de desilusiones o sueños, pero que aquí, ésta noche, terminó oliendo a tierra, y dulce de flores, terminó oliendo a eso que te trae tantos recuerdos de cuando eras niño, recuerdos que no recuerdas nunca haber vivido mas que por el aroma de una época que nunca has comprendido, recuerdos en la época de los sueños, de las añoranzas y miedos viejos de antaño en los que ya no has creído, pero que regresan porque más que acabar tú con tu pasado éste es, el que ésta noche te a consumido.

De noche por el frío sin saber nada más que el camino es como te encuentras con esos lugares en que recuerdas pero en los que ya no piensas, mas que por un aroma y es ahí cuando reflexionas, en lo que pudo haber sido, y niegas lo que es, y esperas encontrar una respuesta para lo que será aunque no te lo has preguntado.

Caminando por la noche es la forma en la que encuentras esos sitios a los que nunca pensabas regresar aun cuando ya has sido parte de ellos, caminar por la noche es un estado natural del alma, sin miedos, ni esperanzas, y en el que no te preocupas hasta llegar a tu destino, una casa común que por pura suerte sigue alumbrada pero en la que sabes no encontraras nada más importante de lo que podrías encontrar en una de sus ventanas, la busca y la encuentra como quien nunca la ha perdido, y empiezas a dudar de su buena suerte si es que alguna vez la ha poseído al encontrarla iluminada, y en ese momento se convence, de que buena o mala, la suerte nunca ha existido.

Y en lugar de preguntar ¿por qué sigues despierta?, sólo dice –Hey ¿cómo has estado?-

Adentro del cuarto la primera reacción de ella es asustarse, y como quien ve a un gato maullando corriendo de la oscuridad salta sorprendida, pero es el mismo momento del brinco lo que le toma para reconocer la voz y caer de nuevo convencida de la visita inexplicable que la viene a saludar.

-¿te asusté?-
-¡no!, es sólo… que no esperaba verte-

Él suspira y después le sigue diciendo desde la ventana –síiii, en realidad yo tampoco sé lo que hago aquí… simplemente, mientras regresaba a casa, no quise entrar, no quise…- dijo sin poder terminar de decir y levantando las manos con un gesto de desesperación.
-y te decidiste a verme-
-no, en realidad fue algo qué pasó sin que lo llegara a pensar, simplemente… Voy caminando y te encuentro entre mis recuerdos, y sin darme cuenta regreso aun sabiendo que no tengo nada a que regresar… yo sólo, venia pensando en muchas cosas del pasado, recuerdos de cuando era niño y esas cosas, ¿sabes a lo que me refiero? A aromas de perfumes y galletas, y otras cosas que he querido y que ya no recuerdo… pero al menos a ti puedo verte todavía…-

Ella sólo hizo un ruido con la garganta, desde adentro del cuarto, mientras hacía un gesto de lástima, o de tristeza, era difícil saber lo que significaba, se sentó en su cama y golpeándola lo invitó a pasar y sentarse, él dijo no moviendo la cabeza.

Ella dio un recóndito suspiro y desde una parte intima de su alma le dice –lo lamento, nunca quise que estuvieras~-
-No quiero oír que lo lamentas, nunca quiero que pienses que tomaste una mala decisión por lo que hiciste, tú estás con quien amas ¿no?, no quiero que estés triste por mí, tú puedes elegir a quien quieras, lo que quiero es que seas feliz-
-pero tú. Yo sé… no quise que te sintieras mal, que te sintieras solo, sé que es en realidad importante para ti ser parte de alguien más, y no sé como te puedo ayudar, traté pero ahora~-
-presentarme a tus amigas no me va a ayudar- interrumpió él –nadie es como tú, nunca voy a volver a encontrar a alguien parecida a ti, nunca te voy a poder reemplazar-

Guardan silencio en su lugar hasta que ella encuentra que decir –tú fuiste muy importante para mí, conociéndote me di cuenta de lo que quería, de lo que ¡yo!... Me enamoré, pero no fue de ti… y fue difícil para mí, pero encontré lo que siempre quise, y entre lo que siempre quise no fue dejarte a ti con miedo de de volver a amar-
-no-
-¡SÏ!-
-El tiempo transforma el amor en casi nada-
-¿Pero cuando será eso? ¿Cuánto tiempo tiene que pasar?, yo sigo lamentando lo que te hice no sólo por lo que nos pasó, también porque veo que no lo puedes superar… y no se como te puedo ayudar…-
-¿de vez en cuando te acuerdas de mí?-
-¿qué?-
-¿me has recordado alguna vez?, ¿sin sentir lástima?-
-hmm…-
-¿así que te hago sentir mal?, entonces ya no quiero ser inocente-
-¿inocente?-
-síii, jugaré a la victima para que te puedas sentir mejor, seguramente habrá un día en el que puedas decir que no sientas lástima de mí así-
-hmm… lo lamento-
-Ya no es suficiente lamentar, me estoy empezando a sentir mal, ¡me dejaste!-
-¡basta!, ¿es broma o qué? -
-¿basta con qué? Me hizo mucho daño no enojarme contigo-
-… ¿en serio?-
-¿es lo que querías escuchar no?-
-… dime la verdad… ¿cómo has estado?-

Él suspiró hondo tratando de inspeccionarse para poder contestar, pero desde afuera en el frío, sólo pudo sentir el aroma de su cuarto -de repente ahí algo que me tiene muy confundido, me he sentido últimamente como muy vívido, aunque no han pasado cosas buenas o demasiado importantes en mi vida… al menos así lo quiero creer para no perder el sentimiento de que tenía algo bueno antes de éste día, o antes de ayer, o antes de lo que pasó, antes de venir a éste lugar de nuevo sin ninguna razón a la que pueda culpar mas que una nostalgia que me hizo desear salir a pasear, sólo caminar, para tratar de recuperar recuerdos, no de ti, no sólo de ti, sino de mi madre y de mi padre, y de mis hermanos en mi infancia, y nunca perder la sensación de que he tenido mejor… algo bueno, recuperar algo de lo que he perdido para aferrarme a eso hasta el final, no sólo de ti sabes, sino de todo lo que ya no estará-

La puerta del cuarto suena y la voz de alguien del otro lado pregunta algo que él no puede escuchar claramente, pero a lo que ella responde –ES DANIEL-
La puerta se abre y la madre de ella entra con una cara angustiada y después su padre también preocupado, ambos se acercan a la ventana y le dan un abrazo y sus condolencias, después los dos hermanitos de ella al pasar por la puerta, al mirar la escena, también entran y repiten de manera menos mecánica y más sincera lo que estuvieron haciendo ya toda la tarde, no dicen nada, sólo lo abrazan y los dejan, ella se levanta de la cama y apaga la luz de su habitación, se acuesta en la cama, y le dice a él todavía estando afuera –en la tarde no tuvimos mucho tiempo para platicar-
-había muchos socios con los que tuve que hablar… era un momento en el que no me podrían rechazar para seguir en el negocio, es lo que mi familia hubiera querido, fue el negocio de sus vidas, pero te agradezco haber ido al funeral, fue muy importante para mí verlos a todos ustedes, en serio. Gracias-
-de n…- ella no pudo terminar de decir “de nada” -soy tu amiga, cualquier cosa que necesites estaré allí, te lo prometí, siempre estaré para ti-
-sí, creo que cuando lo dijiste… me pareció que era por lástima… ¿fue por lástima que dijiste eso?-
-¡No!, eres mi amigo y siempre podrás~-
-sí, sí, sí, sí, sí; siempre podré contar contigo, ya lo sé…-
-¿cómo te sientes?-
-¿Cómo te sentirías tú si perdieras a toda tu familia?-
-…-
-Perdón, no quisiera que te imaginaras algo así… y si pudieras me gustaría decirte que no te sientas tan mal, me gustaría decirte que conmigo siempre podrás contar y todo eso que me dices tú, quizás tengas razón, no tengo razones para sentirme tan mal, si tú fueras la que estuviera en mi condición no me gustaría que sintieras lo que yo siento, en realidad creo que no estoy tan mal. Podré hacer muchas cosas buenas con la herencia de mi familia, como tú dijiste, “coleccionar dinero es patético”, en realidad no creo que nadie necesite tanto dinero para tenerlo guardado, seguro podré ayudar en muchas causas… además ahora soy casi dueño de la agencia… tengo muchas cosas de que ocuparme…. En realidad creo que me espera mucho trabajo ahora, algo en que mantenerme ocupado… algo en que ocuparme… para no preocuparme, para no sentirme triste, para no sentir que esto de adentro sale y me ahoga, porque después que me dejaste, hay algo adentro de mí que me sofoca. Creo que me hizo mucho daño no enojarme contigo, y lo que quizás creía nostalgia era en realidad un coraje enterrado adentro en el alma, y no he llegado aquí sólo por perderme caminando, sino porque quisiera mostrarte algo, quizás que estoy bien, quizás no quiero que te preocupes por mí, aunque ahora creo que lo he venido buscando es… No sé… quisiera mostrarte un poco de desden por tu recuerdo en mi alma, decirte que no soy feliz, que desde hace mucho tiempo quisiera llorar por ti y que no puedo, porque siempre te encuentro diciéndome que todo estará bien y que sigues siendo mi amiga; y ahora eso ya no me deja llorar ni siquiera por ellos, aun cuando de ti ya sólo tengo un recuerdo… quisiera darme cuenta de que no todo tiene que ser bueno, y llorar un poco… por los recuerdos.

No todos los finales tienen que ser buenos, ésas cosas que con arrogancia se dicen de que siempre todo estará bien, o de que las cosas no siempre podrán estar mal, son dichas sin saber, quizás alguien tan positiva como tú no me pueda comprender… pero eras tú quien lo debería de saber, el amor no siempre lo puede todo, y un recuerdo nunca es suficiente, nunca un sueño será mejor que un aliento, nunca dejar de llorar será mejor que decir que nada va mal, somos humanos y tenemos que aprovechar esa capacidad… me estoy dando cuenta de muchas cosas,,, sobre los recuerdos y promesas,,, ¿y sabes qué?, te libero, te libero de tantas promesas dramatizadas que te sentiste obligada a realizar, ahora me doy cuenta de que si todavía algunas veces de mí todavía te acuerdas, no te deberías sentir obligada a exagerar por unas palabras que en algún tiempo te pareció correcto pronunciar, la verdad es que te deberia olvidar también a ti, aprovechar éste sentimiento de vacío para empezar una nueva vida y dejarte hacer la tuya sin que tengas que cargar con un fantasma como yo. Si voy a encontrar a alguien debe ser alguien que te deba reemplazar, necesito encontrar a alguien totalmente diferente a ti, ¿o sabes que?, eso ni siquiera deberia importar, porque si te libero y te dejo hacer tu vida, eso ya no deberia importar, si se parece a ti o si me hace sentir como lo hacías tú, o mejor, o de modo diferente pero me haga sentir bien, para poder ser feliz, sin tener que pensar en alguien que para mí es ahora otro fantasma… y poder ser feliz, y así alguna vez te acordaras de quien fui y dejarás de sentir pena por mí-

Él se va en la oscuridad entre la que ya no pudo notar si ella estaba dormida.

3 comentarios:

Pugliesino dijo...

Puede cortar el silencio de la lectura aquello que le hizo en la noche guiar sus pasos hacia ella.
La forma en que van expresando desde su interior todo el bloqueo en que aquel momento les dejó, intentando descubrir lo que aún no llegaban a comprender.
Extenso pero intenso momento.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Siempre hay algún "fantasma" que nos ahoga y no nos deja disfrutar del mundo y vivir la vida que nos gustaría...

Es una historia muy dura, a la par que muy triste, pero... dentro de ella hay verdades que incluso asustan más que los propios fantasmas.

Mil besotes y otros tantos aplausos por tu relato!! ;)

Queralt dijo...

Hola.
Feliz año.
Bueno, no se puede negar la intensidad del relato. Un relato al cual todos podemos sentirnos cercanos. Sin embargo, a mi me ha parecido algo complicado de leer. Lo que transmite es muy bonito y tienes frases geniales pero, para mi, hay párrafos duros de seguir... quizás sea que es demasiado extenso, no sé... y tampoco me hagas mucho caso porque sólo es mi impresión.
Espero que no te moleste que te lo diga pues, por nada del mundo quiero transmitir que no me haya gustado, ¿eh?
Un abrazo.
Y muchas cerezas.

Queralt.