domingo, mayo 17, 2009

un dia cualquiera

Un día cualquiera no sabes qué hora es, te acuestas a mi lado sin saber por qué. Era el momento que desde hace tanto tiempo habiamos soñado.Era el momento que desde hace tanto tiempo habíamos soñado. Estabas ahí con tu cabello enmarañado, con tu cabeza tiernamente recostada sobre la almohada, junto a mí, pero tu tenias una mirada triste; una mirada que no lograba entender. Todo parecía maravilloso, pero no lograba entender que es lo que te sucedía.

Desde el principio todo fue un sueño que se deslumbraba a lo lejos, un sueño que llegaba a pensar imposible. Ahora que estábamos viviéndolo, tu mirada me desgarraba por completo.

-¿Por qué esta triste? Dime- fue lo único que supe decirte, pero tú solo me veías como si tu mirada me atravesara, como si pudieras ver mas halla de mí, como si presintieras algo fatal.

-¿Qué es lo que vez en mi en estos momentos?- me respondiste, al fin.
Tan frío como el clima que vivíamos.

-veo en tu ojos una pena y dolor, como si algo estuviera atormentándote- te respondía mientras tú llanto me interrumpía, no te pude decir más – No llores, me harás llorar-

-Esto no es fácil para mí; ¡entiéndeme por favor! Sé que en la vida hay que luchar y siendo pobres con una cruz, pero no puedo más.- me decías mientras las lagrimas que nacían de tu ojos, vivían por tus mejillas hasta morir en tu labios. – Tu amor vale más, por eso te pido que no sufras más por mí y te vallas. Vete lejos y no vuelvas.-

-Si es por el hijo que estas así, seca esas lágrimas, ya llegara. No somos tú ni yo nadie para decidir cuando llegara-

-¿Qué si jamás puedo tener un hijo?-

-Ya le tocara a otra afortunada parirlo. Si no se puede y tanto quieres un hijo, se podrá adoptar uno- No te puede decir más, había empezado a llorar también.

Esto nos dolía mucho a los dos, pero me dolía mucho más a mí, como explicarte que la razón por la que lloras no tiene nada que ver contigo; si no que yo soy la razón por la que tu no puedas tener ese hijo que deseas.

lunes, mayo 11, 2009

"No se como llegó, pero tu nombre estaba ahí"


"No se como llegó, pero tu nombre estaba ahí" escrito en la escencia de este dia. Lo podia ver en el aire, como en la hojas. El otoño había empezado días antes, se podía sentir la brisa fría y las hojas empezaban a caer de los árboles describiendo tu forma; las nubes grises cubrían hasta donde mis ojos alcanzaban a ver. Estoy parado en la orilla de un puente, observado la belleza de la ciudad, algo grande para mi gusto, hay muchas personas, tráfico y contaminación.


Miro hacia abajo, la distancia según me habían dicho son ciento treinta y cinco metros de altura, al fondo pasa un río pequeño que ahora es un arrollo debido a la industria. Es un hermoso mirador y las personas no se detienen, es raro que alguien lo haga.


Es la primera vez que me acerco aqui, nunca había tenido tiempo de venir, pasar un momento a solas y observar, es mi primera vez desde que llegue hace ocho años. Mi vida es como la de los demás que pasan, nadie tiene tiempo de contemplar. Todos miran, pero nadie observa.


-Hola-


Volteo a ver y es una chica de cabello negro con una chaqueta de color café, pantalón negro y una camisa de cuello de tortuga, es linda, sus ojos son color verdes como el de las hojas.


-Hola- fue lo único que dije, siempre he sido tímido con las mujeres.


Es hermoso, ¿no lo crees?

-Si, es un lindo lugar-


El viento hacia que mi gabardina se moviera con el aire, es como si nuestras ropas bailaran. Me encuentro parado en un lugar que siempre había querido visitar y con una desconocida que me saca platica, como si nos conocieramos de tiempo atras.


-Se porque estas aquí, estas pensando en suicidarte, o ¿me equivoco?- dijo con mucha tranquilidad.


-No quiero ser descortés, no necesito que me hagas desistir, si te acercas saltare lo mas rápido- fue lo único que dije.


-Descuida, no le diré a nadie, yo también me voy a suicidar- la forma en que lo dijo fue lo más triste que oido en mi vida.


Esta chica es como cualquiera, solo que esta muy tranquila, habla con tanta naturalidad, se va a suicidar y lo dice con una frialdad absoluta. Supongo que ella lo había planeado hace mucho.


-¿Como sabes que me voy a suicidar?-


-Lo puedo ver en tus ojos, además lo puedo sentir en tu presencia, se que te vas a morir hoy, te he estado observando desde hace rato-


No sabia que decir hasta que me pregunto: -¿Porque te vas a suicidar? se ve que eres un buen chico que lo tiene todo.


estaba nervioso pero conteste con sinceridad -Bueno mi vida... no es tan buena que digamos, es algo triste, monótona y sin sentido, podría decirse que nada me llena, he probado con muchas cosas, pero el sentimiento de tristeza y vacío siguen ahí-


-Yo me voy a suicidar porque tengo SIDA, contraje el virus al picarme con una aguja en el laboratorio donde trabajo, ya llevo un año así y siento que mi vida no vale nada, mi futuro es morir.


De pronto al oír su motivo siento como si una daga fría se clavara en mi corazón. Me intrigaba saber porque ella se iba a matar, si es bonita y tiene un buen cuerpo. Pobre chica, sin futuro, sin sueños, sin metas, todo se acaba hoy.


Me he dado cuenta que algunos tenemos nuestros motivos para morir, se aprecia mas la vida cuando estas por terminarla, sabes lo que has hecho, lo que no harás y eres conciente de todo lo que pasa a tu alrededor.


Se acerca conmigo a la orilla, solo una pequeña división impide que saltemos, pero es fácil de cruzar, el viento acaricia nuestros rostros, es hermoso.


Me acerco a ella y le doy un abrazo, es lo único que puedo hacer por ella, no hay cura para el virus que porta en la sangre. Dos extraños unidos por un acto, por un mismo deseo, un mismo final.


¿En verdad vas a saltar? Me pregunta ella, mientras miramos al fondo.


-Si, creo que si-


¿Te podría acompañar, no quiero saltar sola?


-Claro, no hay problema en ello-