sábado, febrero 02, 2008

Ya No Partiré Nunca Más de tu Lado


-"Me he tragado una cancion" para estar aqui, me perdi entre el diluvio de un dia soleado, Navegando donde la luna resplandecia en el horizonte, pero alfin estoy aqui.

-Cuanto odio ver llover, cuanto amo ver la luna desde aquí-
-Se supone que la luna se ve igual desde cualquier lugar-

-No, es diferente cuando la veo aquí contigo-
-¿Por qué dices que odias ver llover?-

-Porque he pasado mucho tiempo navegando, he viajado mucho para llegar a esta isla contigo, he pasado mucho tiempo cruzando por un océano que parecía infinito para poder verte. Muchas noches, sólo viendo al horizonte, sólo una línea que divide a dos obscuridades diferentes, sólo guiado por la luna, por eso odio ver llover, porque no me dejaba encontrarla, y eso me recuerda todo el tiempo desperdiciado tratando de llegar contigo, me recuerda cuando lloro.-
-Aquí no se puede llorar, ¿entiendes lo fantástico que es este lugar?, podemos hacer lo que queramos, no ahí límites ni restricciones para lo que deseamos, aquí podemos ser lo que siempre anhelamos-

-Pero ahí algo. Recuerdo mirar el océano mientras llovía, pero aquí nunca llueve. Recuerdo el sonido que había. Recuerdo cuando golpeaba el suelo.
Yo adoraba ver llover, pero amé ese sonido al ir contigo, mientras nos cubríamos debajo del mismo paraguas, y decías que me amabas, y me besabas, y que conmigo siempre estarías, yo aprendía a amar el sonido de la lluvia-
-Decías que odias ver cuando llueve-

-Eso es lo que no entiendo, ahí algo que me tiene molesto, ahí algo que recuerdo pero no comprendo. Una tormenta, como la de allá a lo lejos, mientras viajaba en medio del océano. Recuerdo una tormenta, y a la lluvia, y el mar embravecidos -
Nunca ahí tormentas aquí, este lugar es perfecto, ¿acaso no estoy yo aquí?-

-Sí, pero todavía no lo comprendo, ¿por qué viaje tanto tiempo? ¿Qué ha pasado conmigo? ¿Y por qué estás tú aquí?-
-Te lo dije, yo siempre estaré contigo-

-¿Y si fue así entonces por qué emprendí este viaje? ¿Por qué me alejé? ¿No era lo que yo quería? Yo me alejé y no lo entiendo ¿es esto una trampa? Ahora sé por qué me trajiste a este desierto, donde nunca llueve-
-No, no, estás confundido, esa tormenta a lo lejos no es tu juicio, tú estás conmigo, siempre estarás conmigo-

-No, no siempre podrá ser así, tú misma lo dijiste, una vez, mientras seguías conmigo, y después te fuiste. Tú fuiste la que te alejaste y ahora quieres estar conmigo-
-¿Por qué me dices eso, por qué lo quieres recordar? estoy aquí para ti ¿no lo vez? ¿Lo demás qué importa?-

-Pero tú te fuiste de mi lado, yo lo recuerdo pero no lo comprendo; yo me alejaba de ti, y eso es lo que no comprendo. Te dejaba sola, y ahora me arrepiento. Yo no supe aprovechar el tiempo que pasamos juntos, por eso te quería tener sólo a ti en este lugar, ahora lo veo-

Ella parecía muy triste, con las manos cruzadas, y la mirada baja, sólo mirando al suelo, mirando a la luna. Atrás de ella sólo el espacio y su negrura, volteó hacia arriba y miró a la tierra donde se veía una tormenta, se mordió el labio de arriba justo como él recordaba que hacía cuando se encontraba muy preocupada, él recordaba todos sus gestos y caras; él notó en ella un miedo a ser olvidada, y ella no dijo nada.

-Eres muy hermosa, siempre optimista, siempre muy valiente, por eso no me dolió cuando me dejaste, sabía que hacías lo correcto porque yo era el que nunca se acercaba.
Ahora veo lo que me debió ser más importante, ahora sólo tengo tu imagen, un recuerdo desgastado que me ha hecho olvidar que te extraño tanto. Aquí no puedo hacer nada, mas que mirar la luna, y mirar la tierra, y recordarte, y recordar mi final con aquella tormenta. No, estando aquí nada es lo mismo-

-Una vez te dijiste, que si pudieras, entrarías en un sueño donde dejarías la tierra, y te embarcarías de nuevo pero conmigo para estar lejos, y siempre estaríamos juntos en ese sueño, viendo lo infinito que es el océano, y que mirarías a la luna y a las estrellas como nunca lo habías hecho, porque estaría contigo-

-Eso sólo lo podría saber yo, nunca te lo dije… Creo que aquella tormenta en mis recuerdos me ganó, creo que he despertado de un sueño, demasiado hermoso para ser cierto, demasiado placentero para poder estar completo. Ahora ya no quiero seguir más en este sueño, quisiera encontrar una oportunidad de nuevo. Es hora de volver a la tierra, regresar a la tormenta, empezar de nuevo como tú me enseñaste a hacerlo. No te preocupes, ambos lo hemos dicho: “siempre estaré contigo”. Esta vez, trataré de ser digno, empezaré siempre estando a tu lado, y quizás esta vez, me pueda quedar contigo.

5 comentarios:

Mj dijo...

Alguien dijo alguna vez, que lo importante, más que el destino, es el camino. Bendita maldición la de tu personaje de tener que reandar el camino una y otra vez.

Pugliesino dijo...

Debe ser eso de que tras las nubes sale el sol.Pero seca el rocío de lo fue,de lo que no acertó a ver,y el sol ya no calienta.
Historia de desesperación y esperanzas.Bien descrita!

Klover dijo...

Lo he encontrado un poco largo para lo que cuenta, aunque el contenido en sí tiene su punto para ser explotado...Revisa los "ahí/hay" ;)

Cuídate. Gracias por escribir con la frase

Anónimo dijo...

Ya me la leí el martes, pero mi conexión estaba de malas y no me dejaba comentarte...

Decía que siempre es bueno volver a empezar y, sobre todo, tener la posibilidad de poder hacerlo, ya que no siempre es así...

Un besote!

Ricardo dijo...

Coincido con el resto de los comentarios: está bueno tener una nueva oportunidad, pero con más sabiduría.
No siempre ocurre. Y, muchas veces, se la desaprovecha.

Un cariño desde el sur de nuestra América